Con el gran Héctor

Así es, la última entrada es del jueves y hoy es lunes, pero no hay demasiado que explicar. El viernes por la mañana estuve tomando un café y dando una vuelta por el recinto del santuario Meiji, en Harajuku, con Héctor García, también conocido en el mundo japonófilo como Kirai, autor del blog del mismo nombre –clásico de los clásicos, funcionando desde 2004– y de unos cuantos libros sobre Japón. En persona sólo habíamos coincidido una vez, hace más de ocho años en una noche de cena y risas en Shibuya con unos cuantos individuos más como el ínclito traductor Marc Bernabé y otros. Una charla estupenda. Y ese viernes, poco más que contar, trabajando en casa.

La «puerta roja», del periodo Edo, una de las entradas al recinto de la Universidad de Tokio

El sábado por la mañana seguí trabajando en casa, pero a partir de mediodía me lo di libre porque había quedado en Shibuya primero con dos buenos amigos de hace como catorce o quince años, con los que fui a comer y a hablar tranquilamente en un cafetería durante dos o tres horas; y después había quedado para cenar y dar una vuelta con algunos compañeros de cuando estuve aquí unos meses estudiando japonés hace más de ocho años. El domingo no había quedado con nadie y además hizo bastante mal día, así que lo dediqué a trabajar en casa.

Y hoy, lunes, he pasado la mañana en el Instituto Historiográfico de la Universidad de Tokio consultando unos documentos, ahora estoy en la biblioteca de la Keiō University porque me han traído un libro que les había pedido, y luego pasaré un rato por el apartamento antes de ir a cenar con unos amigos. Y mañana será otro día.